Gratos recuerdos del paso de Gabriela Mistral aquella tarde del 26 de septiembre de 1954 afloraron durante la mateada efectuada el sábado pasado en la plaza de la localidad de El Tambo.
El evento, organizado por el Municipio de Vicuña y la Parroquia local, se desarrolló entre sabrosos mates, ricas churrascas, queso de cabra asado a las brasas y la amena conversación que fue matizada con adivinanzas, cuentos, chistes, declamación de poemas y varias patitas de cueca.
Muchos de los vecinos presentes relataron con entusiasmo y nostalgia cómo fue el paso de la poetisa por el pueblo ese año 1954 cuando regresó a su tierra natal, convertida en Premio Nóbel de Literatura.
Raquel Alcayaga (74), pro ejemplo, nos contó: “Tenía 23 años cuando Gabriela vino al Tambo; recuerdo que entró a la casa de la madre (religiosa) Rosa Elena Rojas, directora de la escuela, que está frente a la plaza; allí intercambiaron regalos y tomaron mate. Yo y mucha gente nos turnábamos para mirar por la ventana que daba a la calle”.
Por su parte, Silvia Palma, actual propietaria de la antigua casa de adobe donde estuvo la poetisa elquina, muestra con orgullo el rincón donde Gabriela tomó el mate: “Fue aquí donde Gabriela compartió el mate con su amiga Rosa Elena y las autoridades de la época. Yo y otras amigas nos asomábamos por la ventaba que daba a la calle donde había mucha gente esperando que saliera”.
Luis Palma Rojas (64), otro vecino de El Tambo, confiesa que tuvo el honor de recitarle un poema a Gabriela cuando se detuvo unos minutos en la antigua escuela. “Tenía 9 años y recuerdo que Gabriela era una mujer alta y sonriente que abrazaba a los niños”, señala.
La mateada, que fue presidida por la alcaldesa Gloria Torres Espejo, comenzó con la “Oración del mate”, leída por el padre Fidel Carmona: “En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, que salga el mal, que entre el bien, como Jesús entró a Jerusalén”.
Se concluyó con el importante anuncio de la autoridad de realizar una gran mateada en la Plaza de Armas de Vicuña, para el verano del 2007 en el marco de las actividades del aniversario de la ciudad y como una forma de ofrecer un nuevo producto turístico a los visitantes.
La Mateada Mistraliana en El Tambo fue institucionalizada mediante decreto municipal el 16 de noviembre de año pasado con el objeto de perpetuar la memoria de Gabriela Mistral a las futuras generaciones.
El evento, organizado por el Municipio de Vicuña y la Parroquia local, se desarrolló entre sabrosos mates, ricas churrascas, queso de cabra asado a las brasas y la amena conversación que fue matizada con adivinanzas, cuentos, chistes, declamación de poemas y varias patitas de cueca.
Muchos de los vecinos presentes relataron con entusiasmo y nostalgia cómo fue el paso de la poetisa por el pueblo ese año 1954 cuando regresó a su tierra natal, convertida en Premio Nóbel de Literatura.
Raquel Alcayaga (74), pro ejemplo, nos contó: “Tenía 23 años cuando Gabriela vino al Tambo; recuerdo que entró a la casa de la madre (religiosa) Rosa Elena Rojas, directora de la escuela, que está frente a la plaza; allí intercambiaron regalos y tomaron mate. Yo y mucha gente nos turnábamos para mirar por la ventana que daba a la calle”.
Por su parte, Silvia Palma, actual propietaria de la antigua casa de adobe donde estuvo la poetisa elquina, muestra con orgullo el rincón donde Gabriela tomó el mate: “Fue aquí donde Gabriela compartió el mate con su amiga Rosa Elena y las autoridades de la época. Yo y otras amigas nos asomábamos por la ventaba que daba a la calle donde había mucha gente esperando que saliera”.
Luis Palma Rojas (64), otro vecino de El Tambo, confiesa que tuvo el honor de recitarle un poema a Gabriela cuando se detuvo unos minutos en la antigua escuela. “Tenía 9 años y recuerdo que Gabriela era una mujer alta y sonriente que abrazaba a los niños”, señala.
La mateada, que fue presidida por la alcaldesa Gloria Torres Espejo, comenzó con la “Oración del mate”, leída por el padre Fidel Carmona: “En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, que salga el mal, que entre el bien, como Jesús entró a Jerusalén”.
Se concluyó con el importante anuncio de la autoridad de realizar una gran mateada en la Plaza de Armas de Vicuña, para el verano del 2007 en el marco de las actividades del aniversario de la ciudad y como una forma de ofrecer un nuevo producto turístico a los visitantes.
La Mateada Mistraliana en El Tambo fue institucionalizada mediante decreto municipal el 16 de noviembre de año pasado con el objeto de perpetuar la memoria de Gabriela Mistral a las futuras generaciones.
Noticia de Jorge Olivares
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